FECHA: Puente de Todos los Santos
MATERIAL: Tilo europeo.
basajaunbidaiaria@gmail.com
De los mares del sur al mar Cantábrico, al mar de los vascos, al Mare Vasconum que es así como denominaban al mar que
golpea nuestras costas con tanta bravura.
A principios del mes de noviembre, coincidiendo con el puente de Todos los Santos, me dirigí al Peine del Viento para colocar
per saecula saeculorum una pequeña estatuílla de inspiración
polinesia.
El lugar estaba muy concurrido, no es para menos, ya que el Peine del Viento es uno de los lugares más visitados de la ciudad de San Sebastián.
Allá por el año 1976-77 a dos mentes privilegiadas vascas se les ocurrió la idea de crear un espacio, una escultura que peinara los fuertes vientos del Cantábrico. El escultor Eduardo Chillida y el arquitecto Luis Peña Ganchegui aúnaron sus esfuerzos para crear una obra que ya se ha convertido en universal y que es sin duda la más conocida de ambos creadores.
El visitante se queda atónito al observar esas esculturas de acero incrustadas en pleno acantilado donostiarra. Como los moais que miraban al mar, estas piezas de metal dan la bienvenida a los que se acercan por mar a la capital guipuzcoana.
Es el lugar ideal para dejar un testigo de basajaun;esta figura la realicé este verano en Madeira. La foto que podéis ver la saqué al borde del acantilado, pero la estatuílla la dejé más al interior, junto al panel que explica la hstoria del lugar.
Si no lo hubiese colocado allí, hubiera terminado en el mar, ya que ese día hacía bastante viento y las olas empezaban a golpear con fuerza las rocas.
Sé con certeza que esa figurita no duró más de una hora en ese lugar. Según la estaba colocando había algunas personas que no me quitaban el ojo de encima. Qué se le va a hacer!
Agur ikusi arte!
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